jueves, 26 de julio de 2012

SUSANA SE FIÓ DE DIOS

DANIEL 13,60: "todos los presentes clamaron entonces a grandes voces y bendijeron al Señor, que salva a todos los que esperan de Él".


Susana era una mujer muy bella y temerosa de Dios. Estaba casada con Joaquín, que era rico y tenía un jardín contiguo a su casa.Como gozaba de gran estima allí se reunían los judíos a resolver litigios. Los jueces eran dos viejos que deseaban a Susana, un día se esconden en el jardín, ella se queda sola para darse un baño y ellos la sorprenden y la dicen que acceda a le dicen a todo el mundo que estaba con otro hombre.

Susana no accede a los deseos de los viejos, pues no quiere cometer pecado ante Dios, aunque sabe que el delito por el que la van a juzgar se paga con la muerte. Y así es, sólo con el testimonio de los ancianos la declaran culpable. Pero ella exclamó fuertemente: "oh Dios eterno, que ves las cosas secretas y conoces todo antes de que suceda, Tú sabes que éstos han dado testimonio falso contra mí; mira que voy a morir sin haber hecho nada de lo que la maldad de éstos ha tramado contra mí" Y el señor escuchó su voz. Suscita su Santo Espíritu en un muchacho llamado Daniel y se descubre el falso testimonio de los viejos y no se encuentra nada malo en Susana.

"todos los presentes clamaron entonces a grandes voces y bendijeron al Señor, que salva a todos los que esperan de Él".


Susana se fió de Dios, confió totalmente en Él. Ella vivía una vida tranquila y de repente se encuentra con una grave acusación, sin haber hecho nada; sino accedía a lo que los viejos querían, la acusarían de adulterio y eso significaba la muerte porque nadie la iba a creer. Su palabra no valía nada contra la de dos jueces, dos personas importantes, bien consideradas. Su palabra, la de una mujer, no valía nada. En aquella época el testimonio de una mujer no tenía ningún valor, de echo, en ningún momento se le pregunta a Susana qué había sucedido.

Ella se encuentra ante una situación horrible, pero su corazón tenía puesta su confianza en el Señor. Y así sucede, Dios la salva, sin dejar ninguna duda sobre su honestidad.

Queridos hermanos, ¡Dios salva a TODOS los que esperan en Él!, no nos dejemos atormentar con pequeños problemas ni perdamos el sueño por problemas grandes. CONFIEMOS. Confiemos en Dios cuando no nos salen las cosas como queremos, confiemos en dios cuando parece que todo está en nuestra contra, confiemos en Dios cuando no veamos una salida a una situación difícil.

Recordad a susana,sólo tenía dos opciones:
  • Si consentía pecaba.
  • Si no consentía la condenaban a muerte.
Ambas opciones para ella eran la muerte, la primera era la muerte del alma, la segunda la muerte del cuerpo. Y se decidió por la opción que los viejos no la dieron: CONFIAR EN DIOS. Ella confió y Dios la salvó. Está escrito, es verdad, Dios salva a todos los que esperan en Él. A TODOS, y todos, somos todos.

Yo antes pensaba que la fe era simplemente creer en Dios. Y no es así. Es mucho más que eso, tener fe es algo tan grande que no nos entra en la cabeza, que no podemos explicar con palabras, porque nos quedaríamos cortos. No se puede explicar la grandeza de Dios sin mermarla.

Muchas veces, cuando oramos le pedimos a Dios que nos aumente la fe. Dios nos escucha siempre, pero tendremos que poner algo de nuestra parte ¿no creéis?. Pues empecemos a confiar. Empecemos confiando en las cosas más pequeñas, en situaciones cotidianas, en lo que nos sucede día a día.

Desde que empecé esta enseñanza se me viene a la cabeza una frase una y otra vez. Ahora os la transmito a vosotros con la esperanza de que no la olvidéis : CONFIAD EN LO POCO.

¡Alabado sea el Señor!

Cris.